En la actuación, el cuerpo entero está disponible para contar una historia. Sin embargo, en Biónica, para su personaje, Julia Martínez Rubio tuvo que dejarlo de lado y actuar exclusivamente con su cabeza. “Estar metida dentro de una caja me dio una cantidad de información nueva que no tenía, como la de no contar con el cuerpo”, dice sobre el impacto en lo personal y continúa: “A nivel actoral era hacer foco en la gestualidad, en la mirada y en el tono de voz. A la vez de tener el cuerpo encerrado, viviendo una situación muy diferente. Eso fue un desafío interesante”.
Con dos premios a mejor actuación en festivales internacionales, destaca la posibilidad que le dio el papel para desplegar sus herramientas actorales: “Es un personaje muy versátil, que recorre muchos estados tanto físicos como emocionales, un arco muy amplio y diverso. De ser una persona inmóvil pasa por lo dramático de entregarse a algo desconocido y luego ir ganando confianza. Pude probar distintos tonos de actuación”.
“En Argentina también se puede hacer ciencia ficción, aun con los pocos recursos que tenemos y todo el cine de Hollywood metido en la cabeza. Este film además es muy teatral, con pocos personajes y escenografías, pero muy bien logrados”, comenta en el mes del estreno.
- ¿Una película que recomiendes?
Opening Night o Torrentes de amor, de John Cassavetes.
BIÓNICA
Una mujer cuadripléjica millonaria contrata los servicios de una clínica para que a través de una nueva tecnología la reconstruyan y la conviertan en una persona con varias habilidades físicas. Pero el doctor Wuntz, a cargo del equipo, tiene una idea para ir más allá que traspasará los límites.
Director: Sebastián Perillo.
Estreno 27 de febrero.