Corrรญan dรญas de los aรฑos 40 del siglo pasado. Ellos no tenรญan la menor idea de lo que suponรญan un par de esquรญes, pero sรญ de nieve, paisajes hermosos y la innata intuiciรณn de atrapar aventuras con sus manos. Y un buen dรญa llegaron a esa zona paradisรญaca un par de carpinteros suizos que, con la intenciรณn de afincarse en la zona, llevaron todos sus petates: entre ellos, habรญa un par de esquรญes usados. No los utilizaban para cuestiones deportivas, aunque sรญ como medio de transporte en su paรญs. Lo que produjeron fue que se les iluminara la curiosidad a ese par de jรณvenes locales. Con el correr de los aรฑos, dieron cuenta de los primeros porrazos, que fueron formidables. Primero en trayectos de 50, de 80 metros, luego se animaron a mรกs y mรกsโฆ Hasta que uno de ellos recordรณ sus travesรญas a pie por la regiรณn y el grupo de jรณvenes, veinteaรฑeros ellos, comenzaron a hurgar por la zona. Como lo habรญan realizado tantas y tantas veces. Pero ahora calzando los esquรญesโฆ
โNos sentimos unos chicos con su mรกs preciado jugueteโ, asegurรณ muchos aรฑos despuรฉs Amรฉrico Astere, uno de esos muchachos de ese grupete, que tambiรฉn integraban Manuel Pellegrino y un amigo gendarme del que solo recuerda el apellido, Maure. Cada vez, las โtiradasโ eran mรกs arrojadas, y a la vez, mรกs divertidas. En una ocasiรณn tuvieron la idea de llegar hasta la parte mรกs alta del cerro, que estaba a 20 kilรณmetros de la ciudad y a la que se accedรญa, cuรกndo no, por la inigualable ruta 40. Fueron a buscar, entonces, unos esquรญes nuevos que fabricaba en Bariloche un empleado de Parques Nacionales y subieron. Iban y venรญan en un viejo y robusto jeep al que llamaban โLa chanchaโ. La experiencia fue extraordinaria. En las posteriores incursiones se les sumรณ el geรณlogo Federico Graef, que tras ese descubrimiento adosรณ a su currรญculum la categorรญa de alpinista. Fue รฉl quien detectรณ especialmente el denominado cordรณn del cerro.ย
Descubrieron que ese sitio era ideal para generar un centro invernal. Claro que habrรญa que limpiarlo, quitar las lengas, mejorar los accesos, construir refugios (hoy uno de ellos es un monumento histรณrico llamado, justamente, Graef) y tambiรฉn mejorar las bajadas para no acabar estrellรกndose contra los รกrboles. Y generar caminos en el bosque para poder llegar. Ahรญ habรญa potenciales pistas naturales, a las que fueron accediendo, en los siguientes aรฑos, vecinos del pueblo y tambiรฉn de estancias, cercanas o no tanto.
A tal punto que, por esas mismas cuestas del cerro, en las que aรฑo tras aรฑo se posan nuevas nieves, siempre de una calidad suprema, varias dรฉcadas despuรฉs transcurren las aventuras (y tambiรฉn las desventuras) de deportistas experimentados y de aspirantes a sentir un poco del efecto de adrenalina en el cuerpo. Gente de todos los lugares del mundo que llegan a ese hermoso paraje natural: profesionales y aficionados, hombres y mujeres, grandes y chicos.ย
Nos referimos al cerro Chapelco y a San Martรญn de los Andes, ubicados en el alma turรญstica de la provincia del Neuquรฉn. Se trata de esas relaciones en las que no sobrevive el uno sin el otro. El majestuoso cerro estรก apenas a 20 kilรณmetros de la ciudad, unido como con una soga por la RN 40. Y con la cordillera de los Andes como marco extraordinario. La conjunciรณn es una de las mรกs potentes para el turismo en la Argentina, representada en una belleza descomunal, con una enorme variedad de atracciones y posibilidades de confort exclusivo.ย
AGUA DE CHAPEL
Por supuesto que, desde muchos aรฑos antes, abigarrados grupos mapuches pululaban por la zona, quienes bautizaron al cerro como Chapelco. En su lengua significa โagua de chapelโ, ya que justamente se refiere a un arbusto muy popular en la zona. El mismo cerro que cobija al centro de esquรญ que es uno de los orgullos de la regiรณn. Aunque reciรฉn en 1963 se realizรณ el primer medio de elevaciรณn, una silla doble, antes de ello empezaron a llegar algunos turistas que, casi de voz en voz, promocionaban las bondades de esos cerros. Hasta que llegรณ la dรฉcada de los 70, que para las pistas de esquรญ fue una verdadera bisagra. Ni que hablar en los aรฑos posteriores de la instalaciรณn del aeropuerto en la regiรณn y de la telecabina, lo que consolida a Chapelco como uno de los centros mรกs populares y modernos de toda la regiรณn. La creaciรณn en 1986 de la Asociaciรณn de Instructores de Esquรญ y Snowboard es un emblema que grafica el crecimiento.
Ocupa un terreno de 120 hectรกreas de superficie esquiable. Contiene, en un entorno de un bosque de aรฑosas lengas, mรกs de una veintena de pistas muy admiradas por los deportistas mรกs exigentes, quienes suelen llegar a practicar especialidades como esquรญ alpino, de fondo, de travesรญa y snowboard en las cuatro categorรญas: half pipe, slalom paralelo, big air y fun park, en el Snowboard Park. Siempre en diversos circuitos que transitan por lugares maravillosos, desde los que se puede vislumbrar varios horizontes de poesรญa como los del lago Lรกcar o el Parque Nacional Lanรญn y su impresionante volcรกn. O tambiรฉn la vista de la propia ciudad de San Martรญn de los Andes: nadie en este mundo deberรญa perderse verla al pie de la montaรฑa. El Snowboard Park es un espacio diseรฑado muy hรกbilmente para practicar estilos libres y piruetas o freestyle.ย
Aรฑo tras aรฑo se modernizan sus confortables y exigentes infraestructuras, por caso, los diversos lugares de excelente gastronomรญa regional en sus centros especializados. Y tambiรฉn, claro, otras muy diversas actividades, como los paseos en motos de nieve o en trineos tirados por perros huskies siberianos, los llamados Mushing. Y tambiรฉn disfrutar de serenas caminatas por el bosque virgen sobre modernas raquetas de nieve.
YAJAUNAUJรN
Tal vez convenga detenerse en el Cerro Imperial: asรญ se denomina al volcรกn Lanรญn. Aunque los mapuches lo llamaban Yajaunaujรฉn. Su altura mรกxima llega a los 3776 metros sobre el nivel del mar. Estรก incluido en el Cinturรณn de Fuego del Pacรญfico: hace menos de un lustro mostrรณ su furia por รบltima vez hasta ahora, producto de movimientos sรญsmicos en su interior; los primeros registrados por el hombre son de hace 15 siglos. Estรก rodeado por los lagos Tremen (al norte), Paimรบn y Huechulafquen (al sur), y se recuesta sobre el chileno Parque Nacional Villarrica, en la comuna de Curarrehue de la regiรณn de la Araucanรญa. Fue avistado por primera vez en 1782 por el explorador espaรฑol Basilio Villarino.ย
En cuanto al lago Lรกcar y su forma alargada, es otro de los atractivos naturales de la regiรณn. De 25 kilรณmetros de largo, un promedio de 3 de ancho y, lo mรกs impresionante, una profundidad mรกxima que llega a los 277 metros, justo frente al cerro Abanico. Estรก permitida la navegaciรณn, pero estrictamente controlada por la Prefectura Naval. Es de una belleza impactante, aunque, nada mรกs contradictorio, su nombre se constituye de dos partรญculas: lai (muerto) y calcu (brujo). O sea, brujo muerto.
Una recorrida por los cerros y los lagos permite llegar a los miradores Bandurrias y Arrayรกn: las vistas son espectaculares sobre el lago Lรกcar, asombrosas cascadas, las playas Catritre y Yuco asรญ como la Reserva Centenario y el esplendor de los bosques centenarios.ย
CIUDAD DELICIOSA
Es imposible, en una sola nota, una exhaustiva descripciรณn de la totalidad de los atractivos de la regiรณn neuquina que los alberga y que tiene como eje central la estupenda San Martรญn de los Andes, cada vez mรกs acogedora, con sus casi 13 dรฉcadas de historia y una arquitectura tรญpica de los tradicionales pueblos de cordillera. Esa delicada aldea del siglo XXI, con la cordillera de los Andes como horizonte furioso. Con una historia de transformaciรณn permanente, siempre resguardando la esencia de aquel original poblado que transitaban Amรฉrico Astere, Federico Graef y Manuel Pellegrino. Y que fuera creado pocos aรฑos antes, a partir de las necesidades y las lรณgicas geopolรญticas que requerรญan el fortalecimiento de los lรญmites territoriales con Chile.
En general, las casas se construyeron con piedra y madera, o sea los materiales naturales de la zona. Una colecciรณn de ordenanzas municipales regula las dimensiones y el tipo de fachadas de las construcciones. Es una invitaciรณn a la belleza el paseo por la avenida Costanera, para luego circular por las otras de la ciudad, la General Villegas, la General Roca y la infaltable San Martรญn, epicentro de una gran variedad de restaurantes, cervecerรญas, boliches, bares, chocolaterรญas, como asรญ de comercios de ropa y souvenirs. Una de las atracciones de la ciudad es la Parroquia San Josรฉ, que se encuentra sobre Roca, en pleno centro, muy cerca de la plaza principal: otra verdadera hermosura.
A San Martรญn se la considera la puerta de ingreso a la belleza exultante del Parque Nacional Lanรญn. Se trata de una reserva natural, parte de la reserva de biรณsfera andino-norpatagรณnica. Protege los paisajes naturales conformados por una variedad gigante de cerros, vertientes, rรญos, cascadas, lagos de aguas transparentes y bosques nativos. Con sus 412.003 hectรกreas se trata, por su tamaรฑo, del tercer parque nacional del paรญs. Estรก dividido en dos รกreas, a su vez conformadas por tres reservas (Lรกcar, Ruca Choroi y Malleo). En su interior hay pequeรฑas localidades que son verdaderas perlas patagรณnicas: รorquinco, Rucachoroi, Junรญn de los Andes, todas ellas rodeadas de hermosuras como la laguna Verde o los lagos Rucachoroi, Curruhue Grande y el chico, o el Quillรฉn. Este รบltimo poblado, a su vez, tiene estancias que la circundan y que ofrecen alojamiento exclusivo. Y tambiรฉn el bohemio Huechulafquen o el glamoroso Paimรบn, con sus increรญbles campings naturales y privados.ย
Y dispersados en la regiรณn hay un cรบmulo enorme de pequeรฑos pueblos y poblaciones, a cual mรกs bonitos. Por ejemplo, Lahuen-Cรณ. Solo una muestra de una regiรณn exquisita para tomarse un chocolate caliente degustando una gloriosa torta patagรณnica, luego de bajar del cerro Chapelco, y regresar a San Martรญn de los Andes.
CAMINOย ย
San Martรญn de los Andes se encuentra en uno de los extremos del fascinante Camino de los Siete Lagos, que la une con la muy hermosa Villa La Angostura. Uno de los recorridos mรกs populares y, a la vez, mรกs impresionantes de la Patagonia, por su belleza natural descomunal que a su vez atrajo a inversores extranjeros y a magnates que edificaron sus bunkers en vastos terrenos. La ruta 40, cuรกndo no, es la que une el trayecto que transcurre por los lagos Machรณnico, Hermoso, Falkner, Villarino, Espejo, Escondido y Nahuel Huapi, y que cruza dos rรญos emblemรกticos de la regiรณn: el Hermoso y el Pichi Traful.
EXCLUSIVOย
A solo 4 kilรณmetros del aeropuerto, inmerso en el paisaje de la cordillera y rodeado de bosques nativos, glaciares y parques nacionales, se encuentra Loi Suites Chapelco, ubicado en el corazรณn del exclusivo Chapelco Golf & Resort. En 226 hectรกreas de naturaleza patagรณnica, es el รบnico hotel cinco estrellas del lugar. Ofrece confort, relax y aventura, experiencia de montaรฑa รบnica. Fue reconocido por los World Ski Awards como el Mejor Hotel de Ski de la Argentina en mรบltiples ediciones. Posee espacios para toda la familia: piscina cubierta climatizada, spa de montaรฑa โNamasthรฉโ, gimnasio, salas de lectura y juegos, cava de vinos, wine bar y dos restaurantes con exquisita gastronomรญa regional, en sus salones con vista a las montaรฑas, como marco ideal para una experiencia gourmet, asรญ como una carta de vinos seleccionada especialmente de su cava. Tambiรฉn ofrece actividades para grandes y chicos, degustaciones y catas, y un espacio Loi Kids con cine, juegos y talleres artรญsticos.