Fotos: Fernando Giampieri (Estudio Mignone).
INGREDIENTES:
- 180 g de azúcar rubio
- 150 g de aceite de girasol o neutro
- 4 huevos
- Butter milk (250 cc de leche + 1 cucharada sopera de vinagre de alcohol)
- 1 pizca de sal
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 300 g de dulce de leche clásico
- 320 g de harina 0000
- 1 cucharadita (de té) de polvo de hornear
- ½ cucharadita (de café) de bicarbonato de sodio
- 100 g de salsa de dulce de leche para terminar
PREPARACIÓN:
En un recipiente mezclar la leche con el vinagre y dejar reposar unos 10 minutos (esto es lo que se denomina butter milk).
Por otro lado, batir los huevos con el azúcar, con batidora eléctrica, hasta que estén bien espumosos, aproximadamente 5 minutos.
Mientras se continúa el batido a velocidad baja, comenzar a incorporar el aceite en forma de hilo y la esencia de vainilla.
Tamizar la harina con el polvo de hornear, el bicarbonato y la sal. Agregar en 3 partes al batido, alternando con butter milk.
Por último, agregar el dulce de leche. Mezclar con espátula.
Volcar la preparación en un molde de budín, enmantecado y con papel manteca o enharinado.
Cocinar en horno precalentado a 160º, durante 40 minutos. O hasta que, al insertar un palillo, salga seco.
Retirar del horno. Desmoldar en tibio y terminar con la salsa de dulce de leche antes de servir.
TIP
Para agregar el dulce de leche a la preparación, es recomendable que no esté muy duro. Podemos entibiarlo un poco a baño María, para que quede más ligero y podamos integrarlo bien. Tampoco debe estar caliente.