La bebida nacional tuvo un año para celebrar y se prepara para un 2022 más exitoso aún. Con base en la innovación, la Argentina ofrece hoy una propuesta diversa de acuerdo con las tendencias del futuro. Con 215 mil hectáreas de viñas plantadas, produce vino en 14 de las 23 provincias y es el quinto productor mundial. El año 2020 dio cuenta de 791 millones de dólares de exportaciones, número que será superado en 2021, ya que a octubre estaba un 12,4 por ciento arriba en facturación, con 844 millones de dólares, siendo el Malbec el gran protagonista. En la Argentina hay unas 1247 bodegas registradas según los datos del Observatorio Vitivinícola, pero solo 871 molieron uva esta cosecha. Gracias a su valor agregado, el vino genera empleo directo e indirecto; si se compara con la soja, que por cada 100 hectáreas emplea a dos personas, el vino precisa 72. Así, la industria da empleo de forma directa a unas 150 mil personas y es sustento directo o parcial de unas 400 mil. Además, el vino es el complejo agroalimentario exportador que más valor agregado genera: una hectárea cultivada con uva genera exportaciones promedio por un total de 4800 dólares, representando 5,6 veces más que la soja. El consumo también está aumentando. Si se compara el período entre 2018 y 2020, el consumo de vino creció un 10 por ciento. Y solo en los primeros seis meses del 2021 se produjo un salto del 21 por ciento. Esto permite proyectar un consumo per cápita en torno a los 22,5 litros, lo que significa un repunte que, más allá del precio, está muy relacionado con la calidad de la oferta.
TIPS
Cuando hace calor, todos prefieren beber algo refrescante, por eso la lata es la más elegida por cómo mantiene la temperatura. Por suerte, la industria del vino apeló a la innovación, y a finales de 2019 impulsó el desembarco de los vinos en lata. Sin dudas, una nueva forma de consumirlos de manera práctica y cuidando el medioambiente. Según el último informe del Instituto Nacional de Vitivinicultura, entre 2020 y 2021 la lata aumentó un 77 por ciento en la categoría de envases, siendo el de mayor crecimiento. Es decir que conquista cada vez más espacios, dado que permite un consumo individual, brinda seguridad por ser hermética y es ideal para consumir vinos en espacios donde hasta ahora era inusual encontrarlos, como playas, balnearios, piscinas y parques. También en bares, fiestas y reuniones nocturnas. El 50 por ciento elige blancos dulces y rosados jóvenes, que se disfrutan más bien fríos, aunque los espumosos predominan.
MINIGUÍA DE VINOS
EMILIA
SAUVIGNON BLANC 2021
BODEGA NIETO SENETINER, MENDOZA $620
PUNTOS: 88
Blanco refrescante y práctico para disfrutar en ocasiones informales, gracias a su tapa a rosca. De aromas nítidos a frutas blancas y cítricas, trago ágil y vivaz, con dejos especiados y herbales que asoman en el final de boca. Es un blanco ideal para acompañar pescados y frutos de mar, o también para disfrutarlo solo como copa de aperitivo antes de la mesa.
TERRAZAS DE LOS ANDES
RESERVA CABERNET FRANC 2020
BODEGA TERRAZAS DE LOS ANDES, LOS CHACAYES $990
PUNTOS: 90
Con la fuerza del cepaje y del lugar llega la nueva cosecha de este Cabernet Franc, de aromas expresivos y vivaces. Paladar fluido, con taninos incipientes que resaltan su carácter frutal y sus típicos dejos herbales. La madera se percibe bien integrada sobre el final de boca. Ideal para acompañar carnes rojas a la parrilla en verano porque permite servirse fresco.
KAIKEN DISOBEDIENCE
BY FRANCIS MALLMANN 2019
BODEGA KAIKEN, MENDOZA $2000
PUNTOS: 91
Moderno blend de Malbec del Valle de Uco (60%) con toques de Cabernet Sauvignon y Merlot de Vistalba. Sus aromas son equilibrados y de carácter frutado, con cierta madurez. Paladar voluptuoso y franco, de paso mordiente con notas de frutas rojas, tierra mojada y leves dejos vegetales. En su final muestra que todavía está joven y que tiene potencial de guarda.