La crianza digital y los modos en que la tecnología ha invadido la vida de las familias es un tema de conversación cada vez más recurrente. ¿Pantallas sí o pantallas no? ¿Cuánto tiempo? ¿Son todos los dispositivos iguales? ¿Cuál es el mejor entretenimiento para los niños de entre 6 y 9 años?
El pediatra Enrique Orschanski explica que antes de recibir su primer teléfono propio –algo que en la Argentina ocurre alrededor de los 9 años–, los chicos y las chicas disponen de tiempo, ganas e imaginación para desarrollar “juegos verdaderos”. Se refiere a ser protagonistas de invenciones lúdicas: quién es quién en ese momento, qué voz utilizarán en el juego, cuándo comenzará y cuándo finalizará, cuál será el argumento y sus consecuencias. Creación pura.
“Esta maravilla ocurre entre los 6 y los 9 años”, dice. Detalla que a esa altura ya han superado la etapa inicial de crianza, y ahora, con rasgos propios y singulares, dan rienda suelta a la imaginación y a la creatividad. Para ellos, cualquier objeto puede ser todo.
“Muchos reciben un regalo y prefieren jugar con el envase, ya que el autito siempre será el autito, y la pelota nunca será otra cosa. En cambio, una caja de cartón puede ser una nave espacial, el Williams de Colapinto, el cofre del tesoro o la cueva donde guardar sus secretos”, grafica.
El médico subraya que esas capacidades suelen ser interrumpidas por obligaciones escolares o extraescolares que les imponen normas y límites. Muchos se adaptan, otros no tanto. “Algunos de quienes se rebelan terminan en consultorios de pediatras, psicopedagogos, psicólogos y demás profesionales a fin de ‘hacerles entender que deben portarse bien’. Una pena, digo yo, podar su naturaleza”, opina.
Durante ese período, también aparece la tentación del uso de la tecnología, ese “oscuro objeto del deseo” que tanto distrae a sus padres, madres y hermanos mayores.
“La Sociedad Argentina de Pediatría sugiere que a esas edades los chicos y las chicas no deberían superar las dos horas diarias frente a pantallas, y siempre supervisados por adultos responsables. Esto incluye la utilización de filtros parentales, de fácil uso para las familias y que reemplazan muchas ausencias inevitables”, dice el pediatra.
Natalia Lazzarini es mamá de Sofía, de 6 años. Dice que llegaron a un acuerdo familiar para determinar el uso o no de pantallas. La niña ve dos horas por día de televisión y casi nada en el celular de los padres. Eso supone, entre otras cosas, no darle el teléfono cuando suben al auto y jugar al veo veo o cantar en el coche.
“No es lo mismo el celular que un dibujito o una película en la tele. Hay que ir eligiendo qué ven, porque los chicos una vez que aprendieron a encender el televisor y a poner Netflix eligen; por eso siempre tiene que haber un adulto”, remarca.
Con el celular, sostiene, es aún más complejo, porque en algunos juegos aparecen publicidades o mensajes inadecuados para la edad, como dibujos de nenas vestidas de princesas embarazadas o con acné. “Te obliga a estar al lado todo el tiempo viendo qué ven. Para mí, YouTube es bastante riesgoso”, opina.
CÓMO SE ENTRETIENEN
La televisión sigue siendo el dispositivo que mayoritariamente utilizan los niños y las niñas de entre 6 y 9 años de todas las clases sociales.
Según una encuesta nacional, el 46 por ciento utiliza celulares y cuatro de cada diez usa redes sociales entre una y tres horas al día.
El estudio cuantitativo “Góndola infantil” sobre consumos de medios y entretenimiento en esa edad, realizado por la primera agencia de investigación, desarrollo y estrategia de América Latina que cocrea con infancias, llamada Labi, revela que siete de cada diez encuestados (71,6 por ciento) dicen que la TV es la pantalla que más usan, seguida por los celulares (46 por ciento), las tablets (16,1 por ciento), la PC (12,7 por ciento) y la consola de videojuegos (10,8 por ciento).
Según lo expresado por los padres, el 54,1 por ciento de los niños utiliza dispositivos electrónicos entre una y tres horas al día.
El trabajo midió cuáles son los principales dispositivos tecnológicos, el consumo de contenidos infantiles, el uso de entornos y redes sociales, el consumo de videojuegos y la elección de regalos de las familias hacia sus hijos. Se encuestó a 7066 personas de todo el país (250 padres de niños de entre 6 y 9 años) entre el 9 de septiembre y el 23 de octubre de 2024.
Para Shila Vilker, una de las directoras de Labi, uno de los datos interesantes es el de la continuidad de un dispositivo tradicional como la televisión como medio de entretenimiento. “Esta distribución es particularmente homogénea respecto al nivel socioeconómico. En aquellos niños que pertenecen a hogares con nivel socioeconómico ABC1+C2 (más altos), el uso de la televisión representa un 69,2 por ciento, mientras que, en los demás niveles socioeconómicos, el uso de la televisión representa un 75,7 por ciento”, indica.
Entre las redes sociales, YouTube (64,5 por ciento) y TikTok (24 por ciento) están a la cabeza. El 39,5 por ciento de los niños y niñas de 6 a 9 años usan redes sociales entre una y tres horas al día.
El pediatra Enrique Orschanski asegura que cuando les prestan una tablet o un teléfono, la mayoría de los niños de esa edad –sin distinción de género– “mira películas en YouTube, juegos inocentes y de fútbol”. “Entre los 8 y 9 años, pueden asomarse a youtubers, aunque se aburren rápidamente”, agrega.
EN REDES SOCIALES
¿Qué miran los niños y las niñas en redes sociales? Los resultados de la encuesta arrojan que entre los canales de YouTube o youtubers favoritos figuran Mr. Beast, canales de música, Alejo Igoa, Diki Duki Daniel y Fede Vigevani. Respecto del consumo de videojuegos, aparecen tres como mención espontánea: Minecraft, Roblox y Mario Bros.
Cielo Salviolo, también directora de Labi, explica que YouTube emerge como el más usado. “Un 64,5 por ciento de los encuestados manifestaron que sus hijos o hijas utilizan con frecuencia esta plataforma, seguida por TikTok (24 por ciento), WhatsApp (11,4) e Instagram (10,9). En la actualidad, Facebook representa una red social de uso marginal entre el público infantil”, detalla.
Un cuarto de los padres consultados reconoció que desconoce cuánto tiempo pasan sus hijos en las redes sociales. El 15,8 por ciento no recuerda cuánto tiempo utilizan los dispositivos y el 19,2 por ciento de los padres ignora cuáles son las redes sociales que usan sus hijos.
“He visto a nenes de 5 o 6 años usando TikTok en una habitación solos, constantemente scrolleando, con el riesgo de que en algún momento aparezca una situación violenta o pornográfica”, dice Virginia Digón, mamá de Guadalupe (9) y Santiago (6), muy preocupada por los desafíos que supone la crianza digital.
Observa que muchas familias están desinformadas sobre los riesgos o los minimizan.
“Algunos padres creen que es lo mismo dejarles ver un dibujito en Netflix que permitirles usar TikTok”, agrega.
CONFLICTOS Y TENSIONES
La omnipresencia de las pantallas en la vida cotidiana provoca conflictos y tensiones entre padres e hijos.
Sobre esta cuestión, Orschanski propone definir mejor el mundo adulto, al que ellos aún no deberían acceder, e instalarse físicamente (o con filtros parentales) entre los contenidos digitales y los chicos.
Además, sugiere mostrarse como ejemplos sin tecnoadicción y “facilitar espacios amplios y tiempo ilimitado para que desarrollen lo que luego perderán: la imaginación”.
“En caso de que tengan su propio teléfono antes de los 9 años, propongo ‘recreos digitales’”, plantea.
Natalia, la mamá de Sofi, enumera una gran cantidad de estrategias que implementa con su marido para que la niña juegue con otros chicos y vaya a la plaza.
“Es una tarea titánica, porque lo más fácil es enchufarles la pantalla cuando uno viene cansado de trabajar. Pero creo que vale la pena hacer ese esfuerzo extra y dedicarles tiempo, porque esta etapa va a marcar de por vida cómo se van a relacionar con los otros”, piensa.
Virginia Digon coincide en que la crianza en tiempos digitales “es un tema”.
“Debemos lidiar con estas cosas que no vivimos en nuestra infancia y tenemos que aprender a gestionar. Es todo un desafío como padres”, dice.
En su caso, sus hijos ven dibujitos en la tele dos horas al día. “Saben que cuando se va la niñera es hora de ver los dibus; con eso dejamos de renegar y de estar negociando constantemente”, cuenta.
Prefiere las plataformas a YouTube, que considera riesgoso por la aparición de contenido no deseado.
“No estamos sentados con ellos, pero chequeamos que vean dibus que no sean violentos o que sumen y no resten”, agrega.
Sus hijos no tienen celular ni usan TikTok, aunque algunos compañeros de su hija de 9 ya cuentan con teléfono propio y, por lo tanto, WhatsApp. “Es un desafío y se vuelve un tema de negociación constante”, sostiene.
LOS FAVORITOS
¿Cuáles son los contenidos infantiles preferidos por los chicos de 6 a 9 años? Según el estudio de Labi, los dibujos de Discovery Kids, películas, dibujos animados en Cartoon Network, YouTube Kids, Bluey, Dragon Ballz Z o los de plataformas como Netflix.
Los personajes preferidos son Zamba, Peppa Pig y Bluey.
¿Qué eligen regalarles los padres? En primer lugar, figuran los juguetes (43,2 por ciento), seguidos de dinero (13,2 por ciento), videojuegos (5,7 por ciento) y dispositivos tecnológicos (2 por ciento).