Carmen Vils y Guido Spangerberg comandan la dirección creativa de la marca inspirada en la belle époque porteña con aires gauchescos. Identidad local con énfasis en el lujo y la calidad internacional.
Por Cata Greloni Foto Patricio Pérez
Scott nos pidió que nos inspiráramos en la estética de Buenos Aires, en la París de Latinoamérica”, comenta Carmen Vils desde el atelier de la marca, ubicado dentro del hotel boutique Mansión Algodón, en Recoleta. Ese fue el primer acercamiento de la diseñadora de 25 años con Scott Mathis, el CEO de Algodón Group, cuando empezaron, hace tres años, a definir la estética de Gaucho Buenos Aires, la etiqueta de lujo que forma parte de Algodón Group, un holding de negocios inmobiliarios y capitales estadounidenses.
Egresada de la UADE y con experiencia en alta costura, Carmen timonea junto a Guido Spangerberg –diseñador de accesorios de la UBA, de 36 años– la etiqueta de lujo que fusiona elementos de la cultura gauchesca con el estilo elegante y de herencia europea de los porteños. Producen sus colecciones –de prêt-à-porter, sportwear y accesorios de cuero– en la Argentina y, por el momento, venden de manera virtual en los Estados Unidos, de donde ambos creadores acaban de regresar de presentar su tercera colección, Déjà Vu.
- Cuéntenme acerca de la presentación de la colección en Nueva York.
Carmen Vils: El desfile fue a mediados de septiembre y tuvimos un mes para preparar toda la colección, más el desfile. Fue una colección que partió de fotos inéditas de expediciones de la NASA, con siluetas de los 60 y 70, y una paleta de color y estampas inspiradas en la obra del artista Tomás Maldonado. Fue muchísimo trabajo, pero salió muy bien. Además es la primera vez que vemos el desfile desde los asientos, en vez de desde el backstage, y pudimos observar de primera mano la reacción del público.
Guido Spangerberg: Además de la preparación del desfile, también hicimos la campaña en Buenos aires, con la influencer Angie Landaburu, así que fueron tiempos de locos, pero la recepción de la prensa, las estilistas y las celebridades fue increíble, y nos estamos posicionando muy bien. Les gustó mucho el nivel de diseño y la creatividad de la marca.
- ¿Cómo definirían la identidad de Gaucho?
CV: En Gaucho Buenos Aires nos aferramos mucho a lo autóctono, el estilo tradicional argentino, en contraste con lo contemporáneo. Tomamos ciertos elementos de lo gauchesco –como la guarda pampa, que es nuestra estampa insignia, más siluetas o recursos como el lazo, las tablas o las pinzas de su vestimenta– para incluir en prendas de nuestras colecciones. También incorporamos tejidos a mano y muchas prendas y accesorios en cuero, y piezas claves como el sombrero, el cinto, el poncho, que completan el estilismo. Nuestros clientes son personas con suficiente carácter como para ponerse cualquier prenda y salir a comerse el mundo, como productos con mucho brillo y color y diseño. Es una vuelta de tuerca del gaucho tradicional, una estética más contemporánea, pero que conserva rasgos autóctonos.
- ¿Cuáles son los principales desafíos de producir lujo de nivel internacional desde el país?
CV: Para lograr un producto de lujo no solo hace falta contar con materiales de primera calidad, sino también con proveedores que tengan la técnica y la maquinaria necesaria. A veces, con tal de ahorrar pasos en el armado o resolver, los proveedores buscan soluciones que no son las que uno quiere en el diseño final; y es arduo el proceso de estar encima del proveedor, de prueba y error, y de muestra y contramuestra. Hace falta trabajar con gente con mucha experiencia, con buenas modelistas, pero también tomar muchas decisiones, imponerse por sobre el “no se puede” y trabajar sobre el detalle.
“La ropa ofrece una vuelta de tuerca del gaucho tradicional, con una estética más contemporánea”.
Guido Spangerberg
GS: El cuero argentino ya de por sí es un lujo. Acá hay muy buenos artesanos, modelistas y gente que cose excelente, pero tal vez no está acostumbrada a los diseños que uno propone. Por eso la alentamos a probar, corregir se corrige después lo que hace falta. Lo que sí traemos de afuera son los herrajes, que los mandamos a hacer exclusivamente a China, porque el mercado internacional es muy competitivo en cuanto a la calidad, y la maquinaria necesaria para lograrlo no está disponible en el país.
- ¿En qué proyectos están trabajando?
CV: Si bien el mercado argentino nunca fue el principal objetivo de la marca, pronto tendremos disponible un e-commerce para vender la colección a todo el país y estamos a punto de abrir el primer local insignia de Gaucho en la planta baja de la Mansión Algodón, en Recoleta. La marca tuvo muy buena aceptación entre el público local, y, a la vez, nuestro jefe está viendo la posibilidad de abrir varias pop up stores en distintas ciudades del mundo. También, de expandir el universo Gaucho a objetos para el hogar y a la perfumería.
Más información:
Instagram: gauchobuenosaires
El pasado, revisitado
A 50 años de la llegada del hombre a la luna, la NASA liberó una serie de fotos inéditas del espacio que inspiraron a los diseñadores a crear una colección con aires setentosos, con detalles constructivos que emulan los uniformes espaciales y recortes de prendas realizados en cuero. La paleta cromática –dominada por el celeste, el naranja y los ocres– y las estampas se completan a partir de la obra del artista y diseñador argentino Tomás Maldonado, quien reversionó la guarda pampa argentina en fusión del logo de la marca, para crear jacquards ópticos, en colores pop.