Mรบsicos, actores, bailarines, cantores. En estadios, teatros, clubes y plazas. Ante miles y miles de personas, pero tambiรฉn frente a un puรฑado sentado en sus butacas, los artistas cobran vida arriba de los escenarios. Sus existencias mismas suceden allรญ, con sus fechas familiares, sus pรฉrdidas, ritos y celebraciones. Fluyen, muchas veces, a incontables kilรณmetros de distancia.
Hoy estรกn aquรญ, en la revista. Nos permitimos por un momento detener el andar de estos artistas y compartir sus voces y gestos, sus historias.
En la nota de tapa, Nelson Aguirre, Diego Granadรฉ y Pablo Tamagnini nos cuentan cรณmo fue que empezaron con La Kโonga. El trรญo cordobรฉs que tiene por delante una gira por los Estados Unidos y otra de casi dos meses por Europa quiere plantar bandera y empujar el cuarteto hacia afuera, haciendo el camino inverso de los gรฉneros que desde otros paรญses se instalaron aquรญ. Es su gran desafรญo.
Como tantos otros grupos, La Kโonga bebiรณ de las aguas del folklore, la mรบsica que sonaba y se bailaba en sus casas de la infancia.
La misma mรบsica con la que se crio nuestro invitado. โEl folklore nunca morirรก, porque siempre podemos volver a guitarrear en el patio de una casa y cantar las zambas mรกs lindas de la historiaโ, nos dijo Sergio Galleguillo, el cantautor riojano representante de la chaya, el tรญpico estilo de su provincia. El patio tambiรฉn es un escenario.
Como siempre, celebramos a los artistas y sus bรบsquedas, quienes vibran en los shows, en las obras y los libros que recomendamos. Los nuevos y tambiรฉn los que ya habitan en nuestra memoria.
Me reservo una recomendaciรณn particular: escuchar a Escalandrum, el sexteto que fusiona jazz, tango, folklore y otros ritmos. Nicolรกs Guerschberg nos contรณ que, despuรฉs de veinticinco aรฑos, lo que los mantiene unidos son las ganas de hacer mรบsica juntos y experimentar, sentir cรณmo el grupo puede โcambiarse de trajeโ sumergiรฉndose en nuevas sonoridades.
Los escenarios estรกn listos, los invito a pasar.
ยกAplausos!
Buena vida.