Agustina Boldrini
Lic. en Comunicaciรณn Social.
Correctora de textos.
En la columna anterior, ayudรกbamos a los mรกs grandes a comprender el lenguaje de los mรกs jรณvenes. Hoy vamos a mostrarles a los mรกs chicos que los adultos tambiรฉn somos picantes y tenemos nuestras expresiones. Asรญ que, ยกvamos!, nada de sentirnos dinosaurios y adelante con algunas explicaciones.
โTiene muchos humosโ, โtiene unos humosโฆโ, decimos con frecuencia para referirnos a alguien que se ha tornado vanidoso o, en tรฉrminos mรกs llanos, que se agrandรณ.
Esta expresiรณn procede de una costumbre de las antiguas familias romanas distinguidas. Ellas adornaban el zaguรกn de sus viviendas con bustos de sus antepasados. Ademรกs, para venerar a los muertos y a las divinidades, quemaban incienso. Con el paso del tiempo, este humo y la intemperie oscurecรญan las esculturas, y aquellas casas que tenรญan las imรกgenes mรกs renegridas representaban mayor tradiciรณn. Se consideraban mรกs presuntuosas aquellas esculturas que tenรญan mรกs humo adherido.
No es un dato menor, en este contexto, lo que es el humo en sรญ: es un gas con mucho volumen y color, que es impactante, pero que tiene muy poco peso y es efรญmero. De la misma manera, una persona que tiene humos estรก inflada por algo tan liviano y escurridizo como el aire.
โPocas cosas nos delatan tanto sobre la edad que tenemos como la forma de hablarโ.
โSer un asโ es una frase que significa sobresalir de una manera notable. Alude al as de las barajas, y especรญficamente se refiere a las cartas que llevan el nรบmero uno y que vencen a las demรกs en el truco.
Por el contrario, hace siglos, esta expresiรณn significaba lo opuesto. Cuando a alguien se le decรญa que era un as, representaba una ofensa, puesto que โasโ era una abreviatura de โasnoโ.
El sentido con que empleamos hoy esta frase tiene sus raรญces en la Primera Guerra Mundial. En ese contexto, los aviadores de Francia llamaban as (en francรฉs, significa โasโ de las cartas) al piloto del escuadrรณn que derribaba el mayor nรบmero de enemigos. La prensa espaรฑola se encargรณ de reproducir este tรฉrmino y asรญ adquiriรณ el sentido con el que se emplea en nuestros dรญas.
โTe piquรฉ el boletoโ es una expresiรณn que indica que ya descubrimos la forma en la que actรบa un otro. Tiene su origen en una actividad que realizaban los inspectores cuando subรญan al colectivo: controlaban el pago del pasaje. Su funciรณn consistรญa en circular asiento por asiento, pedir los tickets y, con un picaboleto, hacer un agujerito. El que no habรญa pagado tenรญa dos opciones: abonaba o se bajaba.
Ahora, en gran parte de nuestro paรญs, los boletos son electrรณnicos, y los usuarios no reciben mรกs el comprobante impreso del viaje, sino que los datos quedan almacenados en una tarjeta. Sin embargo, podemos escuchar esta expresiรณn en boca de gente muy joven aรบn.
Lo mรกs gracioso de las frases aรฑosas es que los hechos que les dieron origen son casi histรณricos. Por eso, tuvimos que irnos un poquito para atrรกs en el tiempo para conocer el origen de algunas frases cancheras del mundo adulto: visitamos la Antigua Roma, dimos una vuelta en aviรณn por la Segunda Guerra Mundial e hicimos un paseรญto en un colectivo de antes. ยฟQuiรฉn nos quita lo bailado?