Una cordobesa y una porteña son las creadoras de Maggma, una marca de indumentaria a la que definen como “elegante pero cómoda”, con local en ambas ciudades y clientes en todo el país.
Foto: Pato Pérez
La convicción y el amor por lo que hacen pudieron superar los obstáculos de la distancia y la pandemia. Guadalupe Varela, diseñadora de moda nacida y residente en Córdoba, y Elena Brennan, contadora con su estudio en Buenos Aires, concibieron en 2019 el proyecto de lanzar su propio emprendimiento de modas y lo hicieron realidad con el nombre de Maggma durante el difícil año 2020. Empezaron con un local en la capital cordobesa y más tarde le sumaron otro en el porteño y cool Palermo Soho. Así consiguieron dar un giro en sus vidas para dedicarse a lo que aman, con el plus de que su trabajo también le gusta a un público que valora el diseño y la calidad de confección en sus colecciones de ropa “casual” para el día a día que no siguen modas ni tendencias establecidas.
- Empecemos por el principio: ¿por qué un nombre tan volcánico como Maggma?
Guadalupe Varela: No fue fácil encontrar nombre… Podemos decir que representa la fuerza interior, el fuego interno que emana de un volcán. Esas rocas fundidas que al entrar en ebullición salen con fuego y fuerza para afuera convertidas en lava. Digamos que todo eso representa a nuestra energía interna.
- ¿Cómo se conocieron viviendo en ciudades diferentes y cómo desde áreas tan distintas se unieron para fundar esta empresa?
Elena Brennan: Nos conocemos porque Guadi es hija de un matrimonio anterior de mi esposo, que es cordobés, pero vive en Buenos Aires, y ella lo visitaba seguido. Yo tenía mucha experiencia en planificación financiera, pero siempre en relación de dependencia. Desde hace mucho quería tener mi propio proyecto y la moda me encantaba. Empezamos a planearlo y en 2020 lanzamos nuestra primera colección, la de otoño-invierno de ese año.
GV: Trabajar juntas es algo natural, nos complementamos. Yo ya tenía alguna experiencia en cuanto al diseño, porque una vez había desarrollado una marca con mi madre, que es diseñadora de toda la vida. Vengo de una familia de gente creativa, y Elena aportó su experiencia en finanzas y empresas, así que formamos un buen equipo.
- ¿Cómo definen sus colecciones? ¿Para qué uso están concebidas?
GV: Empezamos a diseñar con un concepto muy claro: ropa elegante, pero cómoda, para cubrir la necesidad de vestimenta urbana, que vaya bien para la vida cotidiana y el uso diario. La idea es transmitir esa dualidad: ropa de sastrería en algodón o deportiva con tapados de paño. Hacemos prendas como blazers y pantalones, pero para combinar con zapatillas, remeras de jersey o buzos de frisa. También tenemos tejidos: este año lanzamos sweaters, sacones largos hasta los pies y ruanas. Para cada producto desarrollamos nuestra propia moldería, la imagen, la estética y el concepto. Ah, y un detalle: son todas prendas sueltas, nada al cuerpo.
- ¿Cuál es el perfil de usuario, el target al que apuntan?
EB: Pensamos en una mujer creativa, profesional, bien arreglada, pero sin esfuerzo. Nuestras prendas se adaptan al día y a la noche, así que al salir de casa te ponés algo nuestro y listo, ya estás vestida para toda la jornada con algo sofisticado pero sencillo. Como todas nuestras prendas son versátiles, cuando desarrollamos una línea lo hacemos para que se puedan combinar las prendas entre sí y con las colecciones anteriores. En este sentido, nuestra línea es slow fashion, es decir que no pasa de moda al año siguiente. Además, todas estas prendas son fáciles de combinar entre sí porque se complementan.
«Pensamos en una mujer creativa, profesional, bien arreglada, pero sin esfuerzo».
Elena Brennan
- ¿Cómo planifican su producción?
GV: Hacemos colecciones reducidas, que consisten en pequeños lanzamientos o “cápsulas” a lo largo del año. Somos absolutamente inclusivas y por eso abarcamos desde el XXS al XL, y si hay una medida que no tenemos, la hacemos especialmente. Para eso, usamos nuestra propia tabla de talles desarrollada por nosotras mismas, más amplia y con capacidad de abarcar más opciones. En general, todas nuestras prendas son holgadas, más que entalladas, y el calce es perfecto. De hecho, hay muchos modelos y medidas que se repiten año tras año porque siguen teniendo demanda.
EB: Producimos cuatro cápsulas por año: otoño, alto invierno, primavera, verano, así que tenemos novedades cada tres meses, pero las colecciones que funcionan bien las seguimos fabricando. Justamente ahora tenemos en desarrollo una minicapsulita unisex con buzos y remeras que vamos a dar a conocer en marzo.
- ¿Cómo trabajan el tema de los colores?
GV: Nos gustan los colores vibrantes. Fuimos una de las primeras marcas en ofrecer colores contrastantes y audaces como mostaza, violeta, naranja o verde en tapados y pantalones. Fue algo muy bien recibido, porque son prendas que levantan el outfit y representan el magma, el brillo y el protagonismo. Incluso para 2024 se viene una gran movida de colores vibrantes e intensos como verde, azul, naranja, rosa lima, rosa pálido, magenta, violeta, celeste, turquesa, magenta… toda una explosión de contrastes.
- ¿Cuáles son sus canales de venta?
GV: Tenemos nuestros dos locales físicos, uno en la avenida Recta Martinolli en la ciudad de Córdoba, y otro en Buenos Aires, en Palermo Soho, además de la web para ventas on-line. Aclaremos que nuestra web es muy completa: cada prenda tiene mucha información sobre la hechura, los talles y los colores disponibles. Además, damos asesoramiento personalizado cuando nos consultan por redes sociales o WhatsApp, y hacemos envíos a todo el país.
- ¿Tienen novedades para adelantar?
EB: Estamos trabajando en nuestra primera línea de fiesta, que ya está muy avanzada, para usar en casamientos y eventos más formales, siempre con nuestra estética. Va a incluir vestidos cortos y largos, monos, tops, pantalones de tiro alto y accesorios. Las partes superiores van a ser entalladas, y de la cintura para abajo, más sueltas. Como en todas nuestras líneas, tratamos de que todo sea cómodo y holgado.
- ¿Incorporan en su trabajo criterios de sustentabilidad?
GV: Tenemos una gran conciencia del tema ecológico. Tratamos de no producir de más ni comprar telas a granel, y tampoco usamos cuero animal, sino ecocueros. Somos muy cuidadosas del proceso productivo, empezando por la elección de los talleres. Además, siempre encargamos cantidades limitadas para no generar rezagos y nuestros procesos son bastante artesanales. Es un trabajo consciente y muy detallista. Nos demanda mucho tiempo, pero amamos lo que hacemos.