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La gran sonrisa

Todos los diputados aprobaron la propuesta de Paso y en medio de aclamaciones se firmó el Acta de la Independencia. Pienso que aquel día también debe haber habido muchas sonrisas.

David Ruda – Director

Estimados lectores:

Arturo Puig nació con el destino escrito: iba a ser actor y tendría una gran sonrisa. Es difícil imaginarlo en otro lugar que no sea la actuación, o verlo sin su sonrisa. Y si no, basta con apelar a nuestra memoria para que de inmediato se nos aparezca con una risa de oreja a oreja en ¡Grande, pa!, ¿se acuerdan?, el programa más visto de la historia de la televisión argentina. Aunque parezca una eternidad, fue apenas en los años 90 y llegó a tener picos de rating de 62 puntos. ¡Impresionante! Estuvimos con él, lo entrevistamos y nos contó las historias detrás de un hombre que ha sabido ser fiel a su destino.

Este mes, nuestra invitada es Leila Guerriero. Referente del periodismo narrativo, Leila demuestra –como sus rulos– que la realidad no es siempre lineal ni la que está a la vista, y que, por supuesto, puede ser contada de otras maneras.

Enrique Macaya Márquez, testigo de los genios de la pelota, inaugura su columna “Vivencias”, hablándonos sobre la victoria y la derrota, y también sobre los caminos que se recorren para terminar en ellas. Si alguien escribió alguna vez que el fútbol es como la vida misma, le saco por un rato su frase para esta presentación.

Y para el final me guardé la columna de Felipe Pigna sobre el Día de la Independencia. El caballo que lo lleva hasta aquellos días sabe cómo ir sin equivocarse de sendero. Escribe que aquel 9 de julio en Tucumán era martes y amaneció soleado. Siempre hay alguien que rompe el frío, y aquella vez fue Juan José Paso, que les preguntó a los congresales de las provincias “si querían que las provincias de la Unión fuesen una nación libre de los reyes de España y su metrópoli”. Todos los diputados aprobaron la propuesta de Paso y en medio de aclamaciones se firmó el Acta de la Independencia. Pienso que aquel día también debe haber habido muchas sonrisas.

Como siempre, esperamos sus genialidades en “La página en blanco” y sus “Recetas con historia”. Los dejo en buena compañía.

¡Buena vida!

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