Un equipo de investigadores del Instituto de Investigación Biomédica de Lleida (IRBLleida), el Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL) y el Centro de Investigación Biomédica en Red de Cáncer (CIBERONC), entre otros, ha identificado un grupo de moléculas reguladoras que desempeñan un papel crucial en el desarrollo del cáncer de endometrio.
El estudio, publicado en la revista Cell Death & Disease, destaca la importancia del clúster de microARNs miR-424(322)~503 en esta enfermedad, abriendo nuevas perspectivas para su tratamiento.Los microARNs (miRNAs) son pequeñas moléculas que regulan la expresión de genes y participan en procesos biológicos esenciales, incluido el cáncer. Según el tipo de miRNA y tumor, su función puede variar, actuando como oncogén o supresor tumoral. En el caso del cáncer de endometrio, el estudio revela que el clúster miR-424(322)~503, compuesto por los miRNAs 424 y 503, se sobreexpresa cuando se pierde el gen PTEN, un fenómeno frecuente en este tipo de cáncer. La pérdida de PTEN activa la vía PI3K/AKT, que promueve la proliferación celular descontrolada y bloquea la apoptosis, un proceso clave para evitar la transformación maligna de las células.
El cáncer de endometrio es el tumor ginecológico más frecuente y el sexto más común entre mujeres, con unos 420.000 casos anuales a nivel mundial y más de 5.000 nuevos diagnósticos al año en España. Su incidencia ha aumentado en los últimos años, especialmente entre mujeres postmenopáusicas de alrededor de 60 años, debido en parte al envejecimiento poblacional.
El equipo de investigación, liderado por David Llobet (IDIBELL y CIBERONC) y Xavier Dolcet (IRBLleida y CIBERONC), demostró que la eliminación conjunta del gen PTEN y del clúster miR-424(322)~503 en modelos animales reduce significativamente la proliferación celular y restaura la apoptosis, frenando el desarrollo tumoral. “En ausencia de PTEN, este clúster se convierte en un regulador crítico de la carcinogénesis”, explica Llobet. Por su parte, María Vidal, primera autora del estudio, destaca la naturaleza paradójica de estas moléculas: “Pueden actuar como oncogén o supresor según el contexto, pero su papel en el cáncer de endometrio apenas se había explorado hasta ahora”.
El estudio también sugiere que el clúster miR-424(322)~503 regula funciones en células normales del endometrio, lo que podría relacionarlo con otras patologías, como la endometriosis. “Este descubrimiento no solo es relevante para el cáncer, sino que podría ayudarnos a entender mejor enfermedades como la endometriosis, que afectan a muchas mujeres y aún son poco comprendidas”, señala Dolcet.