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COSTA VERDE: MUCHO MÁS QUE COMBINAR PLAYA Y BOSQUE

Pinamar, Ostende, Valeria del Mar y Cariló, junto a Mar de las Pampas, marcan un abanico de opciones extraordinarias también para las vacaciones de invierno.
Pinamar, Ostende, Valeria del Mar y Cariló, junto a Mar de las Pampas, marcan un abanico de opciones extraordinarias también para las vacaciones de invierno.

Pleno contacto con la naturaleza durante todo el tiempo, con cualquier temperatura, en la estación que se desee. El sol trata de colarse entre el bosque y el entorno de la playa, el mar, el cielo celeste. Y no sólo cuando el clima veraniego así invita, sino también durante estos tiempos invernales, de frío más o menos extremo, que invitan a arroparnos hasta los dientes para dar largas caminatas por las arenas, por los médanos, o para zambullirnos… ya no en el mar, sino en la tupida vegetación cercana a la costa Atlántica. O para refugiarnos bajo techo cerca de cálidas estufas a leña y, desde allí, escuchar ese mar furioso que puede helarnos los dedos, pero no si lo vemos mientras tomamos un inolvidable chocolate caliente, desde cualquiera de los bolichitos cercanos, y los chicos garabatean dibujos con sus deditos enguantados, en los vidrios templados y empañados. 

Esta vez estamos en la denominada Costa Verde. No se trata de un apelativo caprichoso… En pleno verano cobra ese nombre por el extraordinario colorido en la abigarrada zona de Pinamar, Ostende, Valeria del Mar y Cariló, que se extiende por definición e historia, incluso en Mar de las Pampas. Y que en invierno mantiene los tonos fortísimos por la obstinada fascinación por la naturaleza, al tiempo que se recrea con innumerables atractivos en los centros urbanos, más o menos poblados. 

Son localidades diferentes en muchos aspectos, pero tan similares en la esencia y en el entorno de amplísimos bosques en el que nacieron, crecieron y se convirtieron en las favoritas si se trata de una escapada más o menos prolongada a la Costa Atlántica argentina, durante cualquier época del año. 

A pocos kilómetros del AMBA, ofrecen atractivos únicos, como gastronomía de todo tipo y nivel y una oferta hotelera variada y compatible para el bolsillo del consumidor. Ideales para descansar y ser epicentro de encuentro con la familia o con los amigos. O para realizar actividades inhabituales y propicias para el descanso, como por caso, yoga o meditaciones en la playa. O aprovechar los diferentes spa y centros de relax que se ofrecen en toda la zona.

En ese sentido, proponemos acompañarlos en un rápido recorrido por la Costa Verde.

La costa es un excelente plan también en invierno. (Foto: Shutterstock).

PINAMAR

Playas kilométricas, médanos y pinares, pero también el charmé y la fisonomía de infinitas residencias que se suman a una vida social nocturna muy intensa y una variedad gastronómica propia de los más atrayentes balnearios. A ello se le agrega la variedad hotelera y, sin duda, la posibilidad de realizar diversísimos deportes: por supuesto, en la playa, en el mar o bajo techo, aún en invierno, cuando el abrigo también es parte de la aventura y la diversión es infinita.

O, por supuesto, disfrutar de la calma que puede dar una apacible caminata en familia por la avenida Bunge, y aprovechar los diversos centros comerciales desbordados de negocios, restaurantes y pubs. Y, al final del camino, llegar a la feria artesanal, en la que de jueves a domingo, se pueden encontrar productos elaborados por emprendedores locales, como cerámica, tejidos, cosmética natural y mucho más.  

Así se podrá arribar a la Avenida del Mar con sus diversos bolichitos frente al mar y su diversidad de paradores. Para combinar, por ejemplo, atardeceres con un taza de alguna infusión riquísima e, incluso, con música en vivo. En cuanto a costos, Pinamar no es necesariamente más onerosa que otras ciudades de la Costa Atlántica. 

OSTENDE Y VALERIA

El paisaje cambia de ritmo casi sin notarse el límite entre los lugares. El bosque de pinos, casi en susurro, invita a caminatas lentas, yoga frente al mar, paseos en bicicleta y deportes acuáticos o tardes de lectura ante un hogar, por caso, en Valeria del Mar. Son balnearios famosos por su ambiente familiar, con actividades para todas las edades. En ese sentido la oferta gastronómica ofrece restaurantes y parrillas para degustar platos típicos y, de paso, gastar un poco menos. En el aspecto hotelero, la zona tiene similares ribetes. Y lo mismo en lo relativo a entretenimientos, ferias y espectáculos. 

La playa de Ostende, ya a 3 kilómetros de Pinamar, está rodeada por una barrera de médanos y bosques de tamariscos y acacias. Tiene la característica propia de que su centro comercial es reducido. El balneario se destaca por su valor histórico y cultural, aportado por inmigrantes que soñaron con una villa con aires europeos. Es altamente recomendable visitar la Rambla Sur y puntualmente conocer las historias del Hotel Savoia y del Viejo Hotel Ostende.

CARILÓ

Muestra el orgullo de ser la más elegante y selecta de la costa. Es la de esas mansiones, verdaderas exquisiteces arquitectónicas. La de una Iglesia local que resulta imprescindible conocer. La del Paseo de las Victorias, edificado con mucha madera regional y la distinción de contener gran variedad de tiendas con todas las marcas de moda y los más afamados centros gastronómicos. La del increíble Cariló Golf Club que durante todo el año suele convertirse en el centro de encuentro y socialización para los miles y miles de aficionados a este deporte, quienes eligen sus elegantes canchas.

La de las extensas playas de arenas finas, que se disfrutan en traje de baño durante el verano y con bufandas en inviernos: en una y otra época, se puede gozar de mateadas (o la diversidad de bebidas y tragos que se pueda imaginar) así como caminatas, running, paseos… Claro que los más arrojados también se animan al surf.

La Cariló de los bosques increíbles que se extienden incluso más allá del balneario y que invitan a excursiones inolvidables. Por caso, si se alquila un cuatriciclo se puede realizar un paseo que tal vez comience por la arena y que continúe por el bosque, o viceversa. Son recreaciones que también se pueden realizar en familia o amigos, especialmente cuando se dispone de vehículos más amplios y aptos para tales superficies, como pueden ser las tan diversas 4×4…

Mar de las Pampas. (Foto: Prensa).

MAR DE LAS PAMPAS

Y más allá de los denominados médanos de Gesell, y de la propia Villa, tan extensa, popular y atrayente, tres kilómetros más al sur, se encuentra este balneario tan elegante como atrayente, que es el preferido y elegido por capas medias de las sociedades de las grandes ciudades, para trocar el cemento por la naturaleza, la playa, el bosque y un centro cívico que posee y ofrece una belleza muy particular. 

Con sus características calles curvas, sumamente irregulares, con sus subidas y bajadas por doquier, sus casas siempre bellas, chalets sumamente cómodos y hasta hermosísimas mansiones: la variedad es la gran característica de esta Mar de las Pampas verdaderamente hermosa, que tiene dos características muy particulares. Uno es el micro centro, indudablemente atrapante, que cada vez crece más, y el muro de médanos que separa el tan especial paraje con la playa de arenas tan amplias como acogedoras.

TIPS DE INVIERNO

Toda esta zona es particularmente atractiva para estos días, ya que el invierno revela el costado más íntimo y acogedor de los diversos destinos. 

Te compartimos algunos tips.

Alojamiento:

Hay de todo tipo y accesibilidad. En cuanto a hoteles, si se elige Cariló, algunos de los posibles recomendados podrían ser el Ville Saint Germain o el Hotel Puerto Hamlet . En Mar de las Pampas, en cambio, uno de los más conocidos es Miradores del Bosque. Y también es muy sugerente, el Virazón.

Para los chicos:

Cine y títeres: Del 17 al 19 de julio, el Teatro de la Torre presentará una selección de películas del estudio japonés Studio Ghibli (Mi vecino Totoro, Ponyo y El viaje de Chihiro, con entrada libre y gratuita. Los días 24, 25 y 26 de julio, se proyectarán cortometrajes: infantiles a las 17 y para adultos a las 20. Teatro y Títeres: El Teatro de la Torre ofrece funciones durante las vacaciones.

Para todos

Visitas Guiadas: El programa “Descubriendo Pinamar” ofrece recorridos gratuitos por lugares icónicos. En julio, “De visita por Madariaga, el pago Gaucho”. Sendero Eco-Paisajístico: surcando el bosque, a pie o en bicicleta. 

Cabalgatas y Travesías: por el bosque y la playa, así como travesías en 4×4. 

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