Más de 160 organizaciones sociales, públicas y privadas de todo el país que conforman la Red Creer y brindan capacitación y oportunidades de empleo para la inserción socioeconómica de personas que están o estuvieron privadas de la libertad se reunieron evento anual #ElijoCreer. “La Red Creer no solo derribó mitos en torno a las cárceles sino que acercó un modelo de trabajo que sirve, que funciona y que hay que sostener”, recalcó Florencia Sequeira, coordinadora del espacio.
Las personas que están o estuvieron privadas de la libertad y participaron en acciones coordinadas por la Red Creer superan las 3000 en 14 provincias. Eso significa que accedieron a capacitaciones en habilidades socioemocionales y técnicas, a formación en economía social y emprendedurismo o a una oportunidad laboral sostenida, con impacto no solo en sus vidas sino también en sus entornos directos. Los resultados de los cuatro años de trabajo cofinanciado por la Unión Europea se compartieron en un encuentro en la torre del Banco Macro, en el centro porteño, con la participación de organizaciones de Buenos Aires, Santa Fe, San Juan y Mendoza.
“Tenemos un propósito muy claro que es generar un impacto positivo y duradero en la vida de personas que cumplieron condena y que se formaron, aprendieron un oficio, que están conformando cooperativas, que se están haciendo ver y oír y, sobre todo, que están convencidas de que es posible salir adelante y tener una mejor vida”, enfatizó Silvio Del Buoni, director ejecutivo de Potenciar – Plataforma de Impacto Colectivo, la organización coordinadora de la Red Creer. Justamente, el “enfoque innovador y la potencia para tejer esta gran alianza entre actores de los sectores privado, social y público” fue la razón por la que el espacio fue seleccionado entre más de 300 proyectos en 2020 para recibir financiamiento de la Unión Europea en Argentina, según resaltó su jefa de Cooperación, Ilse Couge.
BUENOS RESULTADOS
Los buenos resultados se miden: “Tenemos una reincidencia medida de 2.7% frente a una reincidencia sin intervención dentro del contexto de encierro mucho mayor”, aseguró Samanta Sacaba, líder de Cultura, Sustentabilidad y Asuntos Corporativos de Cook Master. Como una de los primeros espacios en ser parte de la Red Creer, convocó a sus pares: “Nos gustaría echar luz a otras empresas para que tomen parte. Las empresas privadas no podemos desoír las problemáticas sociales”, señaló.
MANERAS DE SER PARTE
La Red Creer lleva adelante su trabajo colectivo gracias a diferentes formas de abordaje territorial de las organizaciones que la componen. Una es la educación en contextos de encierro, que llevan adelante desde el proyecto “Emprendimientos sociales y salud comunitaria” de la Universidad Nacional de Quilmes la Cooperativa Factorial y la Asociación Civil 20 de Noviembre. “Nosotros aprendemos con todos y todas. Co-construimos los conocimientos nuevos. Trabajamos con la formación de habilidades socioemocionales de la Red y en el diseño de proyectos en clave de economía social y solidaria a partir de las experiencias y el recorrido que traen” las personas privadas de la libertad con las que trabajan, describió Selva Sena, docente extensionista e investigadora de esa casa de altos estudios y directora del proyecto.
Otra forma de promover la confianza en personas que, en su mayoría, atravesaron situaciones de inacceso a derechos básicos antes de llegar a la cárcel, es el deporte. Así lo hace en Santa Fe la Fundación Tercer Tiempo, que genera un primer acercamiento significativo a personas que están en contextos de encierro a través del rugby, y luego su equipo interdisciplinario interviene para acompañarlas en el trayecto hacia la libertad. “Trabajamos en el adentro mediante el deporte y los talleres de habilidades socioemocionales, y en habilidades técnicas en el afuera. Una persona que está privada de la libertad y por lo general tiene rotos los vínculos afectivos, le cuesta construir o reconstruir su autoestima. Este tipo de aprendizajes nos sirve para hacer ese trabajo de fortalecer los vínculos con el afuera”, relató Fernando Benítez, presidente de la organización.
Ese espacio de la Red Creer articuló con el proyecto Bien Restituido -que también cuenta con el cofinanciamiento de la Unión Europea- para darle un uso social a un vehículo decomisado del crimen organizado en Rosario. Para que no sea una acción aislada sino una política pública, la organización presentó un proyecto de ley que va cosechando adhesiones. “Queremos mostrar lo genuino que tiene el proyecto y la importancia de que, cuando se efectivice, contemos con organizaciones como la Red que puedan implementarlo al reutilizar los bienes” con un propósito de inclusión, resaltó Lucas Manjon, coordinador de la iniciativa y representante de Libera en Argentina.
“Todo el trabajo tiene un impacto mucho mayor cuando se trabaja en red”, entendió Sequeira. Así lo demostró la experiencia que sigue creciendo y alcanzando de forma positiva a cada vez más personas que están o estuvieron privadas de la libertad y sus entornos directos.
LA RED
La Red Creer es un espacio colaborativo y multiactoral para el diseño, la implementación y la evaluación de distintas iniciativas de impacto colectivo orientadas a la inclusión socioeconómica de personas privadas de la libertad o liberadas, y para sus entornos directos. Está conformada por más de 160 organizaciones privadas, sociales y públicas de todo el país.