La noche en que se incendió el Museo Nacional de Brasil fue tan larga como el dolor que sintió, al igual que sus coterráneos, Paulinho Moska. Junto con los objetos allí exhibidos, se perdió gran parte de la historia cultural del país. Sin embargo, detrás de la tragedia existe una historia conmovedora: “Uno de los bomberos que apagó el fuego es además luthier y utilizaba maderas de rescoldo de los incendios para construir sus guitarras. Entonces tuvo la idea de hacerlo con algunas recuperadas del museo”, cuenta Moska. Las llamaron “Las Guitarras Fénix”, y con ese homenaje el cantautor llega a la Argentina.
También presentará temas de su repertorio, como Todo nuevo de nuevo, y asegura que en la música un poco siempre lo es: “Aunque sea una misma canción, cada vez que la cantamos o escuchamos es diferente. La música es invisible, no se tiene, no se guarda, es como el aire, estamos siempre con ella, aunque no lo percibamos”.
En el escenario estará solo con su guitarra y su voz, “la manera en que nacen sus canciones”, dice. “Un concierto así es la mejor manera de que la gente escuche la esencia de una composición. Y percibir que nada puede ser mayor que la simplicidad de unas palabras cantadas con unos acordes por abajo. Es un formato que ya cruza años y océanos para abrazarnos con su belleza”.
- ¿Un recomendado para no perderse en vivo?
La banda Bala Desejo.
LAS GUITARRAS FÉNIX DEL MUSEO NACIONAL
Comienza con la exhibición de un documental, y luego, lo mejor de su repertorio.
25 de mayo, en Festival de Música Internacional, Bariloche; 26, en Auditorio Belgrano, Buenos Aires.