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Protegerlos de la pirotecnia

Consejos prácticos para que las mascotas no sufran demasiado el estruendo de los petardos en las fiestas. La clave: no reafirmar la sensación de pánico.

Más allá de lo que cada uno opine sobre el uso de la pirotecnia en las fiestas de fin de año, hay algo sobre lo que todo el mundo está de acuerdo: las mascotas no disfrutan en absoluto del bullicio generado por los petardos. Más bien, todo lo contrario: se asustan mucho, se ponen nerviosas e hipersensibles, no pueden dejar de ladrar (o maullar) y hasta es posible que sufran algún problema cardíaco. 

Por suerte, existen diversas formas de aliviarles el sufrimiento que les generan estas explosiones, aunque no se consiga evitarlo por completo. En el caso de los perros, los cuidados deben abarcar todo el día: desde la mañana hasta que finaliza el festejo de Navidad o Año Nuevo. Como primera medida, es recomendable llevarlo a un paseo largo durante el día para que haga gran cantidad de ejercicio, así por la noche ya estará algo cansado y podrá dormir mejor. Si es posible, también será muy útil pasar un buen tiempo jugando con él antes de la cena: esta es una tarea ideal para un chico o adolescente que no tenga otras obligaciones ese día, y evitará que la mascota sufra el típico estrés que siempre comienza con la llegada de los parientes y amigos a la casa.

Después de la cena, apenas empiezan los festejos con ruido, lo ideal es llevar al perro a una habitación y dejarlo allí, si es posible con música o con la televisión encendida para que el sonido tape o atenúe el de los petardos. También puede ser de gran utilidad colocarle algodones o tapones en los oídos, y darle un juguete o golosina para que muerda: dos buenos antídotos para la ansiedad y el estrés. Por supuesto, todas estas precauciones son válidas también en caso de que la familia salga a festejar a otra casa y deje solo al pichicho.

Si de todas formas el perro llega a ponerse muy nervioso, lo ideal es no mimarlo demasiado para no reafirmar el sentimiento de que su pánico está justificado. Más bien, se recomienda tratarlo como si fuera una situación completamente normal.

En el caso de los gatos, existe un método bastante efectivo para calmarlos, y es prepararles un pequeño refugio o escondite en un lugar bien oscuro y tapado con una frazada para jugar y protegerse, como si fuera para un niño. Sirve para distraerlos y relajarlos. 

Por último, si la familia se va a festejar a otro lugar, la casa debe quedar más que nunca completamente cerrada, igual que cada vez que se deja solo al perro o al gato, porque las explosiones pueden empujarlos a escaparse. Y seguro que será un pésimo final para esa noche tener que salir a buscarlos. 

TELLINGTON TTOUCH: ¿SÍ O NO?

En los últimos años, se difundió –sobre todo en Internet y las redes sociales– el llamado método “Tellington TTouch” para proteger a las mascotas del estrés de la pirotecnia. Consiste en envolverlas con una venda a la que solo hay que darle dos vueltas alrededor del tronco y el cuello, y luego hacerle unos masajes circulares ejerciendo presión con los dedos. Se supone que así se las ayuda de una forma natural y no invasiva a que se sientan protegidas y relajadas. En rigor, la eficacia de este método es cuestionada por muchos especialistas que no le encuentran sustento científico, aunque tampoco lo consideran nocivo.

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