La amplia oferta de parlantes móviles se adecúa a todas las formas de escuchar música, ya sea en lugares cerrados o al aire libre. Y a todos los presupuestos.
Está claro que las instalaciones de audio para ubicar en un lugar fijo del living pasaron a la historia. Hoy, cuando se escucha música solo desde archivos digitales, ya sea mediante conexión USB, wifi o bluetooth, los nuevos equipos tienden a ser portátiles para poder ser llevados de un ambiente a otro. Además, unifican en un solo dispositivo las múltiples funciones de fuente de sonido, amplificador y parlante, de modo que ocupan muy poco espacio.
Entre los equipos más básicos y monoaurales (“1.0”, como se dice ahora), un clásico es el cilindro compacto y portátil tipo “latita de gaseosa”, que se mueve naturalmente de una habitación a otra para llevar la música. Dentro de la muy amplia oferta se distingue el Sony Extra Bass XB12, que suena con una gran potencia de bajos e incluso funciona muy bien en exteriores.
En la misma gama hogareña existe una infinidad de modelos que varían en sus prestaciones y estética, porque muchos son también objetos decorativos. Por caso, el pequeño Philips TAS2505b, estilo “cajita de habanos”, es ideal para tener sobre una mesa ratona y ofrece la posibilidad de funcionar en tándem con cualquier otro parlante para generar entre ambos un sonido estéreo (2.0). Además, posee la función de generar luces led desde su carcasa para acompañar la música con una experiencia multimedia.
A su vez, el Xiaomi IP55, con forma de “termito”, pero muy potente, tiene la versatilidad de que su sonido se adecúa tanto a interiores como a exteriores. Cuando se lo usa al aire libre, arroja un audio vibrante de largo alcance; y si se lo utiliza en una habitación, su sonido es de una gran sutileza, como para apreciar todos los detalles. Otros modelos, en cambio, se distinguen por las prestaciones que ofrecen más allá del audio en sí. Es el caso del diminuto pero muy macizo Motorola Sonic Sub 240, monoaural de gran potencia y un amplio rango de graves y agudos, que puede ser controlado a través de los asistentes virtuales Google Assistant, Alexa y Siri.
Incluso hay algunos parlantes que, a pesar de ser portátiles, fueron pensados casi para una ubicación fija, como la estilizada Barra de Sonido Gadnic BS-500. Se trata literalmente de una barra delgada y horizontal, de un metro de largo y con los parlantes en sus extremos, que brinda un lujoso sonido estéreo gracias a sus 95 watts y su capacidad de ecualización. Pero que, sobre todo, es ideal para acomodar delante del televisor y poder escuchar también el audio de una película o serie. Como en un home theatre.
PARA EXTERIORES
La oferta de equipos de audio transportables abarca también a los que son especialmente aptos para usar en exteriores, ya sea un jardín, un quincho, un camping o incluso la playa. Los hay chicos y livianos, como el juego de dos parlantes Fleck 7 BT, de Thonet & Vander, que incluyen su propio sistema para sujetarlos en altura a una pared –obviamente en jardín o patio–. Son ideales para amenizar la sobremesa familiar. Entre los equipos de gran porte, estilo “fiesta” y por lo general monoaurales, se destaca la torre de sonido Noblex Mnt290, de medio metro de alto, con su enorme potencia capaz de “conmover” a todo un balneario.