back to top

Cómo organizar el dinero en la pareja

Uno de los temas por los que más discuten las parejas es por el dinero y por cómo deberían administrarlo. ¿Cuentas separadas?, ¿gastos compartidos?, ¿cómo ahorrar? Estrategias y métodos para lograr el equilibrio. 

Conversar sobre cuánto dinero se gana es un tanto incómodo, pero en una pareja es fundamental para organizarse y marcar un rumbo. Establecer cómo quiere vivir cada uno y cuánto puede aportar económicamente es clave para un vínculo sano. “Hablar del dinero en la pareja es hablar del poder y de la manera en que este poder circula y se distribuye”, dice la psicóloga Clara Coria en su libro El dinero en la pareja: algunas desnudeces sobre el poder. Muchas veces, el que gana más puede encontrarse en un lugar de mayor poder. Por eso es necesario definir qué aporta cada uno en la economía familiar. Algunas mujeres no tienen un trabajo remunerado, pero deben entender que el trabajo de ama de casa implica un gran ahorro y que, por ende, es un aporte significativo. “Cuando marido y mujer trabajan juntos –aunque se trata de casos atípicos–, lo mejor es que cada uno maneje su sueldo por separado. Las cuentas propias permiten un ahorro corriente, para cubrir gastos del consumo cotidiano”, explica el economista, coach y emprendedor Matías Aristei.

Para Coria, los desequilibrios en cuanto a la disponibilidad del dinero común generan diferencias en los grados de libertad y también prerrogativas que favorecen a unos en detrimento de otros. “Como el dinero en nuestra cultura capitalista es uno de los instrumentos privilegiados del poder, su distribución y disponibilidad en la pareja reflejan con toda nitidez cómo está repartido el poder y qué uso hace de él cada uno de sus miembros. Nuevamente podemos afirmar que el dinero es un alcahuete, un alcahuete del poder”, cuenta la psicóloga. La economía familiar es compleja, y si no está organizada puede acarrear algunos problemas: endeudamientos, poca planificación, roces por diferencia de ingresos, y la lista continúa. Pero los problemas con el dinero también tienen que ver con las diferentes personalidades. Algunos son gastadores, otros ahorradores, los hay deudores, mezquinos, entre otras opciones. Por eso es fundamental conversar, conocerse y transparentar la situación de cada uno para “remar” juntos y llevar adelante un plan de economía familiar.

“Lo más importante para manejar la plata en la pareja es ser organizado”.
Matías Aristei

“Dialogar con la pareja y mantener un acuerdo sobre cómo manejar el dinero es importante. Mientras que eso esté claro no deberían surgir complicaciones. Aunque considero que cada uno debe tener su cuenta, hay gastos que deben compartirse, en especial cuando hay hijos”, afirma Aristei. En el modelo “todo es de todos” el dinero funciona como un fondo común en el que todos los miembros de la pareja acceden a las cuentas, tarjetas y dinero de la casa sin importar quién gane más. Cuando por el contrario, cada uno maneja su dinero, un punto crucial es establecer quién va a ser el que pague las cuentas de la casa, la salud y  la educación, que en general es quien tiene mayores ingresos. El economista explica que los gastos también se pueden compartir (modelo fifty-fifty, más utilizado hoy en día), pero es clave que se realice un acuerdo mutuo sobre el tema. “El de mayor ingreso suele pagar los gastos más grandes, como el colegio, la prepaga y los servicios. El de menor ingreso puede pagar algún impuesto, y las salidas se pueden compartir o ser pagadas por el que gane más. Las cuentas también pueden repartirse de manera proporcional al ingreso, por ejemplo en un 70 y un 30 por ciento», agrega. 

“Cuando una pareja se junta, recomiendo que defina cómo va a abordar los gastos. Es fundamental entender los hábitos de cada persona y conocer su puntaje crediticio. Nunca debemos asumir lo que el otro va a hacer. Por el contrario, hay que establecer los acuerdos desde el principio”, sostiene Elaine King, especialista en finanzas  y autora de Parejas felices, cuentas en orden. En su libro, King explica que el 70 por ciento de las parejas que se divorcian comienzan sus conflictos por causa de malentendidos financieros. Para ella, uno de los errores más frecuentes es el de juntar los créditos. “Si uno es ahorrador y el otro gastador, se hace muy difícil alcanzar la meta”, sostiene. Por eso es importante que cada uno conserve su cuenta, aunque tengan una en común para gastos compartidos. Otro interrogante es qué pasa cuando uno gana más que el otro. Para solucionar esto King recomienda que todos los meses destinen un porcentaje proporcional a su sueldo en la cuenta común. Ese fondo puede ser para  un ahorro conjunto. “Tener una meta facilita el ahorro, y para alcanzarla debemos planificar”, detalla. King sugiere que el principal destino del ahorro sea un fondo de emergencia (que consiste en tres a seis meses de gastos fijos cubiertos para enfrentar cualquier inconveniente). Para Aristei, los ahorros pueden destinarse al placer o a herramientas de trabajo como por ejemplo un auto, una computadora o un celular. Sin embargo, considera que para que sean significativos, deben partir de montos significativos, por eso cree que juntarlos puede ser una buena alternativa. Así, cada uno debería contribuir con el cinco o el diez por ciento de sus ingresos a este fin. De todos modos, para el economista, si todo se acuerda, cualquier metodología es válida. “Lo más importante para manejar la plata en la pareja es ser organizado”, concluye. 

LECTURAS Y APP SUGERIDAS

1. El dinero en la pareja: algunas desnudeces sobre el poder, Clara Coria. Paidós, 1989.  

2. Las parejas inteligentes enriquecen juntas: finanzas para parejas, de Gustavo Cerbasi. Grupo Nelson, 2009.

3. Planeación estratégica para parejas, de Isabel Corpas de Posada. Editorial Norma, 2001.

4. Mi dinero, tu dinero y nuestro dinero: cómo resolver los conflictos del dinero en la vida de pareja, de Victoria Felton-Collins. Editorial Norma, 1991.

5. Parejas felices, cuentas en orden, Elaine King. Harper Collins, 2017.

6. Apps: Fintonic, Money Pro o Mint: Budget, bils, finance.

NOTAS DESTACADAS:

LOS BARCOS SON UN PROBLEMA PARA LAS BALLENAS 

El choque con barcos es la principal causa de muerte de las ballenas. Un estudio estadounidense señala que menos del 7 % de las zonas de colisión entre ballenas y barcos tienen medidas de protección. Proponen medidas de conservación.

LA FOCACCIA SE COME DESDE HACE 9 MIL AÑOS 

La exquisita Focaccia tiene su historia. Según un reciente estudio, se la preparaba hace unos 9 mil años, en el neolítico superior, cuando la humanidad recién empezaba a realizar tareas agrícolas y ganaderas.